El Manchester United está listo para una de las transformaciones más ambiciosas de su historia. Tras años de especulaciones, el club inglés anunció oficialmente la construcción de un nuevo estadio con capacidad para 100,000 espectadores, que reemplazará al icónico Old Trafford.
El anuncio fue realizado por Jim Ratcliffe, uno de los propietarios del equipo, quien destacó que el proyecto busca poner al club a la altura de los mejores escenarios deportivos del mundo.
«Nuestro estadio actual nos sirvió de manera brillante durante los últimos 115 años, pero se quedó atrás de los mejores del deporte mundial. Al construir junto al sitio existente, podremos preservar la esencia de Old Trafford, al tiempo que crearemos un estadio verdaderamente de vanguardia que transforme la experiencia de los fanáticos», afirmó Ratcliffe en un comunicado.
Una inversión millonaria para transformar la zona de Trafford
El nuevo recinto, diseñado por el estudio de arquitectura Foster+Partners, se ubicará en Trafford Wharfside, al sur de Manchester, y generará un impacto económico masivo. Según cifras del club, el proyecto aportará 7,300 millones de libras (9,420 millones de dólares) a la economía local, creará 92,000 empleos, construirá 17,000 viviendas y atraerá a casi 2 millones de turistas anualmente.
Sin embargo, la decisión llega en un contexto económico complicado para los Red Devils, que han registrado pérdidas por 380 millones de libras en los últimos tres años y han despedido a 450 empleados en el último año.
¿Cuánto costará y cuánto tardará la construcción del nuevo estadio?
El Estudio Foster+Partners reveló que la construcción tomará aproximadamente cinco años y tendrá un costo estimado de más de 2,000 millones de libras.
«Normalmente, construir un estadio llevaría diez años. Nosotros reducimos ese tiempo a la mitad», aseguró Norman Foster, fundador del estudio de arquitectura.
Para agilizar el proceso, Foster explicó que el estadio se prefabricará en partes y se transportará a través del Canal Marítimo de Manchester, uniendo 160 piezas como un gigantesco mecano. Además, se reconstruirá la estación de Old Trafford, convirtiéndola en el eje central de un nuevo barrio deportivo.
Con este ambicioso proyecto, el Manchester United busca no solo modernizar su infraestructura, sino también recuperar su estatus como una de las instituciones deportivas más poderosas del mundo.